Éxito, arma de doble filo.

Tiene mucha razón quien señala que el éxito en el mundo de las reinas de belleza es relativamente fugaz. Aquí dos casos, de los muchos que existen, de misses que consiguieron asomarse a la gloria, de la misma forma como vieron desvanecerse sus más anhelados sueños.


Sebastián: No existe una fórmula exacta en la difícil metamorfosis de una miss nacional a una miss internacional. La experiencia, la entrega y claro, a veces la suerte, han hecho de que algunas organizaciones hayan encontrado un camino a seguir. Lo cierto es que esa misma experiencia, enseña que el éxito no siempre es eterno. Lo que ayer se vio bien, mañana puede que no. Eso pasó con dos guapas mujeres, Cindy Nell, Miss Sudáfrica Universo y Mundo 2003 e Ingrid Rivera, Miss Puerto Rico Mundo 2005 y Universo 2008. ¿No lo crees así, Paula?

Paula: Definitivamente. Seguí sus participaciones, como una simple espectadora, pero es cierto que hay mucho que decir al respecto. Ambas tienen en común más de lo que podríamos suponer: belleza, éxito, estilo, favoritismo... excesiva expectativa y al final, un amarguísimo sabor a poco. Cindy casi conquistó el Universo e Ingrid, por poco logra rendir al mundo a sus pies.
Sebastián: ¿Qué fue lo que pasó al final?, tenemos algunas conclusiones, pero antes, recordemos un poco más sobre ellas.


CINDY NELL

Esta bellísima sudafricana, retomó el éxito arrollador de sus compatriotas, que allá por los 90's habían conseguido. Su elección no fue recibida de una manera totalmente aceptada, inclusive muchos no la habían considerado como favorita en el "Miss Sudáfrica". El transcurrir de los meses le daría la razón a su elección, Cindy, una muchacha fresca y llena de carisma, llegaba con fuerza al Miss Universo 2003, en Panamá. No podríamos decir que Cindu estuvo en la cima del favoritismo, pero tampoco que estaba rezagada y era una carta fuerte, eso sí.

Su buen porte, su elegancia y mágica presencia, fueron suficientes para los jueces de la prueba preliminar, quienes le otorgaron el visto bueno, para integrar el tan ansiado Top 15 de semifinalistas de ese año. En una recordada noche de Junio del 2003, pudimos observar a una estupenda Miss Sudáfrica, sortear con mucho éxito las diferentes etapas; casi al final de la noche, su estrella no dejaba de brillar y logró quedar entre las cinco mejores, sólo detrás de la inigualable Amelia Vega y de la simpática Mariángel Ruiz.

Cindy había logrado el Tercer Lugar y también buenos pronósticos rumbo al Miss Mundo, de ese mismo año.

Muchos rumores circularon, respecto a su participación en el concurso de los Morley; posiblemente el más sonado fue el de la posibilidad de rechazo, debido a un "ventajismo", luego de destacarse en un concurso previo. Finalmente, el hecho de ser la reina titular de su país pesó más y Cindy llegó a Sanya tan risueña como nos tenía acostumbrados.

Pero la circunstancias habían cambiado y ella no era la misma. En el "Beach Beauty" ("Belleza Playera", competencia en bikini), ya se pudo notar a una desmejorada representante sudafricana, con varios kios de más y un desenvolvimiento mucho más flojo. Los más optimistas seguramente pensaron que el tiempo lo arreglaría todo, pero no fue así. Cindy pasó desapercibida en todas las pruebas, prácticamente desapareció de las listas de favoritas y en la gala final, tuvo que resignarse a observar desde atrás, el llamado de las veinte semifinalistas. Quedó fuera, sin derecho a reclamo, sin importar su buena estampa, de meses atrás.

INGRID RIVERA

Ingrid no era una novata cuando consiguió el título de "Miss Mundo de Puerto Rico 2005". Tenía en su haber algunos concursos internacionales, uno de ellos el conocido "Miss Hawaiian Tropic", donde quedó como semifinalista.

Bien es conocido que en Puerto Rico, hasta hace poco se sabía poco o nada del Miss Mundo. Evidentemente muy opacado en comparación al Miss Universo, por el éxito logrado en este último, seguramente.

Es por eso que Ingrid no causó una inmediata acogida, sino hasta algunas semanas antes del inicio de Miss Mundo 2005. Una vez en la isla china se Sanya, la fama de Ingrid subió como la espuma y su nombre no dejaba de estar presente en cuanta lista de favoritas existiera. Era la más posible opción de triunfo para Latinoamérica.

En la noche final, deslumbró al mundo con su sofisticación, buena pasarela y estupenda soltura. Consiguió el Tercer Lugar, aunque para la inmensa mayoría, era Miss Mundo 2005.

Rivera se adueñó de las preferencias y se convirtió en un referente de belleza en su país y en la región, incluso fungió de jurado en Miss Puerto Rico Universo 2007. "Ingrid no era para Miss Mundo, ella lo tiene todo para ser Miss Universo", era el clamor popular.

Y sus deseos se hicieron realidad. Ingrid postuló a Miss Puerto Rico Universo y como era de esperarse, logró la corona. Su organización quería la sexta corona para una boricua y ningún detalle podía quedar en el aire. La nueva Miss Puerto Rico, pasó por una exhaustiva preparación, que constaba desde instrucciones de modelaje, hasta clases de vietnamita. Todo iba viento en popa.

En Vietnam, sede de Miss Universo 2008, era muy esperada la llegada de Miss Puerto Rico. Pero con la misma fuerza e intensidad, esa expectativa le jugó en contra. La "Miss Mundo 2005 sentimental", de pronto "no era lo que se esperaba". Sus bonos disminuyeron y lo último que la sostenía era el recuerdo de su pasado "Casi gana Miss Mundo ... claro que clasificará en Miss Universo!"

Mas no fue así. Ingrid fue excluída del Top 15 de Miss Universo 2008.


Paula: Dos historias que ejemplifican de alguna manera, el hecho de que el éxito de antaño, no siempre significa un futuro prometedor, pues genera expectativa y presión, las misma que a veces, no son manejadas maduramente por las protagonistas.
Sebastián: Cindy e Ingrid no dejarán de ser dos reinas que marcaron un hito. Ambas exitosas y a la vez, despojadas de lo que alguna vez tuvieron: la preferencia popular.
Paula: De hecho, nunca me ha parecido que una clasificación detemine totalmente la competitivada de una candidata. Algunas veces, las clasificaciones son cuestión de suerte.
Sebastián: Pero cuando se trata de dos "triunfadoras", es difícil asimilar una repentina descalificación. Tal vez Ingrid y Cindy no llegaron en las mismas condiciones a su segundo intento, hasta a lo mejor, nunca debieron intentarlo. El tercer lugar de ambas nadie lo borrará, pero su nada exitoso paso, tiempo después, tampoco. Nuevamente se me viene a la cabeza ... "En el mundo de las misses, no existen los merecimientos"

Cindy e Ingrid posiblemente eran mejores que muchas en cuanto a nivel, pero jugaron mal sus cartas, pese a que ya habían realizado la misma jugada antes.